La restauración y adecuación museográfica
El proyecto arquitectónico implicó tanto el desescombro controlado del refugio como la adecuación del espacio y se incluyó en el proyecto peatonal de la Rambla (2008-2009) impulsado por el Área Metropolitana de Barcelona y el Ayuntamiento de Gavà.
Las actuaciones se ejecutaron en dos fases. En la primera, se procedió a la elaboración de un estudio del estado estructural del refugio, a cargo de la UB, así como la limpieza general de los escombros y tierras, bajo control científico. Otras de las acciones consistieron en la limpieza y consolidación de los elementos derrumbados históricamente y la impermeabilización exterior de la vuelta de hormigón. Así mismo, se prolongó el refugio en dirección a la estación y en la calle de Salamanca, y se creó una salida de emergencia en el sector más próximo a la carretera de Santa Cruz de Calafell (C-245), que consiste en una escalera y sus muros y una tapa.
En la segunda fase se incluyó la construcción del acceso al refugio y la conexión con la travesía urbana al antiguo paso subterráneo de la estación y se instalaron los elementos museográficos para abrirlo al público.
La restauración del refugio permitió recuperar la totalidad de las estructuras conservadas, adecuar el espacio al acceso público y hacer una presentación para coger el significado y el contexto en que se construyó.
La visita al refugio se inicia con un audiovisual que sitúa al visitante en los años 30 y las circunstancias que trajeron a hacer el refugio en la Rambla al lado de la fábrica Roca. La visita incorpora también una banda sonora que evoca las circunstancias de un bombardeo.
El recorrido es accesible.